La innovación y la tecnología social son dos conceptos que están ganando cada vez más relevancia en un mundo en constante cambio. La combinación de estas dos fuerzas pueden tener un impacto significativo en las organizaciones y en la resolución de los problemas más apremiantes que enfrentamos en la actualidad. En este artículo, exploramos cómo la innovación y la tecnología social están suponiendo la transformación el mundo, y cómo a través de los servicios de desarrollo de ecosistemas que ofrecemos en Urbegi Social Impact ayudamos a empresas privadas e instituciones públicas a construir un futuro más sostenible.
Innovación social: el motor del cambio
La innovación social se refiere a la creación y aplicación de nuevas ideas, modelos y enfoques para abordar los desafíos sociales y mejorar la calidad de vida de las personas. A diferencia de la innovación convencional, que a menudo se centra en la creación de productos y servicios para el mero beneficio económico, la innovación social tiene un enfoque más amplio y busca el bienestar de la sociedad en su conjunto.
En este sentido, desde Urbegi Social Impact trabajamos con organizaciones del ámbito público y privado, aplicando metodologías colaborativas y de innovación social en los retos que actualmente enfrentamos como sociedad: empleo, emprendimiento, nueva ruralidad, envejecimiento activo y turismo sostenible, entre otras áreas de calado. Trabajamos desarrollando ecosistemas y generando comunidades y redes, que permiten conectar y estrechar lazos a los agentes vinculados a un área concreta, como vías de trabajo para idear soluciones a estos desafíos de manera colaborativa.
Una de las características más importantes de la innovación social es su capacidad para involucrar a múltiples partes interesadas, incluyendo gobiernos, organizaciones sin fines de lucro, empresas y la comunidad en general. Esta colaboración intersectorial permite abordar problemas complejos de manera más efectiva y encontrar soluciones innovadoras.
Tecnología social: herramientas para el cambio
La tecnología social, por su parte, se refiere a la aplicación de la tecnología para abordar desafíos sociales y mejorar la calidad de vida de las personas. En Urbegi Social Impact contamos con una tecnología propia de desarrollo de ecosistemas que posibilita trabajar de manera asíncrona, descentralizada y online la gestión de comunidades y redes, así como las conexiones entre los diferentes grupos de interés vinculados a las mismas.
En la actualidad, además, estamos implementando un sistema de monitorización, seguimiento y control basado en el desarrollo de cuadros de mando y dashboards para conocer la transformación de los ecosistemas en base a una serie de indicadores esenciales como son la proactividad de los miembros, la actividad generada, el nivel de cohesión entre los participantes, la dimensión del ecosistema, el sentimiento de pertenencia hacia el mismo y los intereses principales de las personas que lo conforman. De esta manera, trabajamos para optimizar la toma de decisiones, maximizando y potenciando ecosistemas vivos y sostenibles.
El potencial de la colaboración
La verdadera magia ocurre cuando la innovación social y la tecnología social se combinan en proyectos colaborativos y surgen iniciativas que prosperan y buscan soluciones a los desafíos de nuestro tiempo. Es por ello que la innovación y la tecnología social nos ofrecen la oportunidad de transformación de un mundo en el que la tecnología esté al servicio de la humanidad y contribuya a la mejora de nuestras vidas y de la sociedad en su conjunto.