El proyecto ‘Kick Off Emprendimiento’ buscaba un foro ágil y representativo que conectara a los actores del ecosistema emprendedor en Euskadi. Con ese fin, se implementó un proceso dinámico que promovió la cocreación y la generación de nuevas iniciativas para enriquecer el Plan Interinstitucional de Emprendimiento (PIE). Este enfoque fomentó la colaboración, la participación inclusiva y el desarrollo de ideas innovadoras.
Antecedente
El proyecto ‘Kick Off: Emprendimiento’ tiene como misión servir de foro de reflexión y conexión en el ecosistema de emprendimiento en Euskadi. Para reforzar esta misión, Grupo SPRI y Up Euskadi confiaron en Urbegi Social Impact para liderar un proceso de dinamización participativo que conectara a actores clave como startups, empresas consolidadas, instituciones públicas, inversores y aceleradoras, con el objetivo de fortalecer la innovación y la sostenibilidad en el ecosistema vasco de emprendimiento.
Problema
La principal necesidad radicaba en lograr una participación inclusiva y efectiva de todos los agentes. Aunque existía una estructura para la interacción, faltaban mecanismos para la integración, la cohesión y la generación de ideas prácticas que tuvieran un impacto real.
Reto
El desafío consistió en transformar el foro en un espacio dinámico, innovador y efectivo de cocreación, donde todas las voces del ecosistema de emprendimiento vasco fueran escuchadas y valoradas. Esto implicaba lograr una representatividad adecuada, fomentar la confianza entre los actores y promover una visión compartida que permitiera materializar ideas en proyectos colaborativos concretos.
También se planteó el reto de identificar temáticas críticas como cultura emprendedora, capital humano, fuentes de emprendimiento, acceso al mercado y la internacionalización del ecosistema sobre las que se trabajaron diferentes ideas que dieron lugar a nuevos proyectos.
Solución
Para abordar estos desafíos, se llevaron a cabo tres sesiones de trabajo presencial distribuidas en diferentes localidades de los tres territorios vascos. Cada encuentro fue diseñado para maximizar la colaboración y la generación de ideas. La metodología implementada incluyó:
- Fase de calentamiento y conocimiento basada en dinámicas para fomentar la confianza y el conocimiento mutuo entre los participantes, estableciendo un ambiente propicio para la colaboración.
- Fase creativa con técnicas de ideación para abrir un amplio abanico de posibilidades y recopilar propuestas innovadoras.
- Fase de análisis y selección en la que se evaluaron las ideas generadas, priorizando aquellas con mayor viabilidad y potencial de impacto.
Impacto
El proceso de dinamización resultó en la generación de nuevas ideas y conexiones entre agentes del ecosistema emprendedor vasco. Los encuentros permitieron identificar proyectos colaborativos concretos que enriquecerán el próximo PIE. Entre los resultados destacan:
- Proyectos en común: se definieron varias propuestas viables orientadas a mejorar el ecosistema, abordando temáticas clave como cultura emprendedora, talento y capital humano, y acceso al mercado.
- Cohesión y representatividad: se logró una participación inclusiva y colaborativa, garantizando la representación de diversos agentes, desde startups emergentes hasta entidades consolidadas.
- Fortalecimiento de la cultura emprendedora: las sesiones sirvieron como espacios de aprendizaje mutuo y promoción de valores como la creatividad, proactividad y resiliencia.
El enfoque garantizó la participación activa y representativa de los agentes, asegurando que tanto voces mayoritarias como minoritarias contribuyeran a las propuestas. Las dinámicas fomentaron el sentimiento de pertenencia, la comunicación abierta y las metas compartidas.
Este proyecto demostró que con un enfoque participativo y estructurado es posible transformar foros tradicionales en espacios de innovación y colaboración, en los que se contribuye a impulsar el desarrollo económico y social.